El técnico del Real Oviedo, Veljko Paunovic, compareció ante los medios de comunicación tras el pase a la final del playoff de ascenso. El conjunto azul está a un solo paso de volver a Primera División y el míster no dudó en manifestar su alegría.
El entrenador oviedista se deshizo en elogios hacia la figura de Santi Cazorla, protagonista en la eliminatoria: “Cazorla y yo lo hablamos. Hay un plan para esta fase. Él nos tiene que dar su mejor versión y para eso hay que gestionar sus minutos. Hoy nos dio lo que necesitábamos. Sé que todos quieren jugar los 90 minutos, pero hay que ser inteligentes”, explicó Paunovic. Más allá de lo futbolístico, destacó su rol humano y simbólico en el vestuario: “Es un honor tenerlo. Representa lo que es este equipo, lo que es Asturias y lo que es España. Su alegría, su talento, su ejemplo... todos los compañeros le cantaban en el vestuario el ‘Oh, Santi Cazorla’. Es una persona tremenda. Nos da mucho dentro y fuera del campo”.
El técnico fue autocrítico con el inicio del encuentro: “Toda la primera parte no fue buena. La presión nos pudo y no supimos mostrar nuestra mejor cara. Nos faltó carácter y liderazgo. Había nervios. El rival nos exigió mucho y no encontrábamos el ritmo”. Sin embargo, valoró positivamente la reacción tras el descanso: “En la segunda parte ajustamos bien. Recuperamos nuestra identidad, mostramos firmeza y supimos lo que teníamos que hacer. Teníamos claro que había que marcar, aunque el empate nos valía”.
Paunovic también quiso destacar la aportación de dos jugadores clave desde el banquillo: “Chaira lleva semanas entrenando bien y Fede muchísimo. Hay que darle mucho crédito al cuerpo médico y al preparador físico. Viñas cambió el partido. Su gol está bien anulado, pero fue muy importante su impacto”.
Sobre su continuidad y el futuro, Paunovic fue rotundo: “Solo pienso en el día del ascenso. Cada respiración está dedicada a eso. No quiero adelantarme. Desde que llegué hay una tremenda energía en este grupo. Quedan dos partidos. Solo falta ir a por ello”.
