Tras el primer entrenamiento al frente de la primera plantilla, el nuevo entrenador del Real Oviedo, Jose Ángel Ziganda, ha sido presentado en la sala de prensa del Carlos Tartiere, donde ha estado acompañado por Manolo Paredes y Francesc Arnau. El vicepresidente oviedista le ha dado la bienvenida, esperando que "c
Por su parte, el Director Deportivo de la entidad ha explicado el relevo en el banquillo, asegurando que "el equipo ha ido en una dinámica positiva desde que llegué, pero no ha arrancado como esperábamos. Nos lastra la clasificación y hemos buscado una reacción. Se nos plantea un cambio tras Alcorcón, en donde conseguimos un mal resultado, lo pensamos de manera conjunta y consensuada, y se optó por ello". Asimismo, sobre la elección de José Ángel Ziganda, Arnau comenta que "nos ponemos en contacto con Cuco, un entrenador experimentado para salir de ahí. Esperamos que de con la tecla para lograr la permanencia".
Tras las intervenciones de los mandatarios oviedistas, José Ángel Ziganda ha valorado su llegada al banquillo del Carlos Taritere: "No veo ningun motivo para no aceptar. Soy entrenador, adoro el fútbol y tenía ganas de entrenar. Que mejor sitio que Oviedo para hacerlo. Todos sabemos la clase de club y ciudad que es, me lo pensé muy poco. Me atrae el reclamo. Estar en un sitio donde te quieren es interesante, es una buena manera de empezar. Y luego el club que es, es un entorno en condiciones. Tenemos afición exigente, y si les damos vamos a disfrutar".
En cuanto a la situación en la que se encuentra el equipo, el navarro considera que "todos la conocemos. En estos catorce partidos lo que urge es la clasificación, no se puede cambiar. Prácticamente todo lo conozco, he visto casi todos los partidos. Conozco a los jugadores y ahora me toca convivir con ello, conocerlos en profundidad".
Preguntado por la primera toma de contacto con el vestuario, el nuevo entrenador destaca que "ha sido buena. Les ves preocupados, cosa que es buena, pero no creo que sea una final el domingo. Debemos de saber dónde estamos y buscar las soluciones para lograr la mejora continua. Tienen muy buena disposición y actitud. Los resultados no salieron como se quieren, pero vamos a buscar la mejora. Si me reclaman es por que algo falta. Es un punto de inflexión para estar fuertes y mejor". Además, Ziganda incide en que "lo bueno que palpo en este vestuario es que todos tienen un objetivo común, por lo que hay que empujar en la misma dirección. Tenemos que centrarnos para ir juntos dentro y fuera. Ese impulso va a ser mucho más poderoso. Nuestro objetivo es cambiar la mente, que vean otra realidad. Queda mucho. A nivel de táctica y posicionamiento incidiremos en la mejora para ser más sólidos y compactos".
Sobre cómo será el Real Oviedo de Ziganda, el téncico cree que "hay que intentar adaptarse a donde uno llega, pero me gustaría ser un bloque, ordenados y compactos. Que el rival tenga que hacer muchas cosas para superarnos. Catorce partidos son un mundo, tenemos que ir a sprint. Le das muchas vueltas, hay muchas posibilidades. Hay que ver cómo está el equipo, nuestros puntos fuertes. La cabeza es importante, llegas con ganas y fresco. No tengo una derrota reciente, y llegó con la perspectiva de sumar los máximos puntos en los catorce partidos. Me gustaría que todos lo vieran así. El entrenador siempre reclama tiempo para buscar su impronta. Ahora queda trabajar, aprovechar el tiempo y no tener excusas. Buscamos argumentos para ganar el domingo en Lugo".
Finalmente, de cara al partido en el Anxo Carro, con el gran desplazamiento de aficionados azules para animar a su equipo, Ziganda comenta que "es lo que gusta. Un club grande como el Real Oviedo aprieta, hay desencantos, pero vamos a Lugo y van más de mil personas. No hay muchos clubes en España que tengan esa suerte", sentenció el navarro.