La tercera jornada de LaLiga SmartBank nos dejó en el último sábado del mes de agosto un Real Oviedo - CD Tenerife en el Carlos Tartiere, donde 6.381 espectadores se dieron cita para ver una nueva cita de su equipo en el estadio oviedista, con reparto de puntos al final de los 90 minutos.
Optó Ziganda por dar continuidad al once que alineó el pasado fin de semana en Los Juegos Mediterráneos, con el estreno en convocatoria de Carlos Isaac y Luismi, con el debut en la 21/22 del centrocampista andaluz. De esta forma, el equipo elegido por el navarro para el choque ante el conjunto tinerfeño fue el formado por Femenías; Lucas, David Costas, Dani Calvo, Pierre; Sangalli, Jimmy, Javi Mier; Viti, Borja Sánchez y Obeng, que saltaron al césped del feudo oviedista en busca de la victoria.
La primer mitad comenzó con un Real Oviedo que se hizo dueño del balón, buscando transiciones rápidas para aprovechar la verticalidad de los hombres de banda y crear peligro con centros al área. Viti avisó a los pocos minutos de juego, con un balón que el guardameta visitante envió a córner. Los azules, bien aplicados en defensa, aprovechaban los robos en campo propio para buscar a Samuel Obeng y comenzar las contras. Las ocasión más clara del primer acto llegó en un buena jugada por banda, entre Pierre y Borja Sánchez, que este puso en el área para que Obeng rematase sobre la meta de Soriano. Atajó el meta canario, dejando el balón muerto en el área con una sucesión de remates posteriores de Sangalli y el propio delantero ghanés. No dejó de intentarlo el conjunto de la capital del Principado, aunque el Tenerife ganó cierta presencia en campo oviedista, sin apenas generar peligro sobre la meta de Femenías. En los últimos compases del primer tiempo ambos equipos se repartieron la posesión, con mucho juego en el centro del campo y con un Real Oviedo que presionaba la línea de salida de balón visitante. Borja, en una buena acción individual, y Viti, aprovechando la presión, tuvieron las dos acciones de peligro que cerraron la primera parte.
Tras el paso por vestuarios el comienzo fue similar, con las primeras ocasiones del lado oviedista, que llevó el peso del partido en los compases iniciales del segundo acto. Las bandas volvieron a cobrar un importante protagonismo, dando amplitud y movilidad al juego oviedista. Continuaba el control oviedista, con muy buenos minutos de los de Ziganda, que tenían en las asociaciones de Pierre y Borja Sánchez una fuente de peligro para generar ocasiones sobre el arco defendido por Soriano. El técnico oviedista movió el banquillo para dar entrada a Jirka, y posteriormente a Borja Bastón y Luismi. Matheus Aiás fue el último cambio de un encuentro que acabó con el Real Oviedo buscando deshacer el marcador inicial, aunque sin acierto para lograrlo.
Nuevo punto en el casillero oviedista, que sabe a poco dada la superioridad y las ocasiones generadas por los de Ziganda, que la próxima jornada viajarán a El Alcoraz para medirse a la SD Huesca.
