El nuevo delantero del Real Oviedo, Alain Arroyo, se ha convertido esta mañana en la novena incorporación de la presente temporada. Procede del Club Deportivo Mirandés, conjunto en el que militó durante tres años y con el que consiguió un ascenso y una permanencia en Segunda División. Ahora, a sus 31 años, se encuentra “muy ilusionado” con formar parte de un proyecto tan atractivo como es ayudar a que el club azul recupere su sitio en el futbol profesional. “Soy una persona ambiciosa y me atraen retos tan bonitos como este”, comentó el bilbaíno en relación a los aspectos que le ayudaron a decantarse por la oferta carbayona.
El ariete no escondió que “las negociaciones fueron bastante rápidas. Mi representante y Carmelo hablaron durante unos días y no me lo pensé mucho en cuanto supe del interés del Real Oviedo y su proyecto deportivo. Soy una persona ambiciosa, siempre aspiro a lo máximo que se pueda, y en ese sentido me encuentro muy cómodo ante un reto tan bonito como es optar al ascenso a Segunda División”. Y es que Alain recordó que “la opción del Real Oviedo es una de las más interesantes de la categoría porque por Historia, afición, estadio e instalaciones no se merece estar en Segunda B, sino en el futbol profesional. Vamos a intentar ascender este año y que pueda ir recuperando su sitio en el futbol español. Me atrajo mucho el objetivo y la confianza en el proyecto que me transmitió Carmelo”.
Lo que parece tener claro el nuevo futbolista azul es la categoría en la que quiere militar la próxima temporada. “Soy ambicioso y mi objetivo es jugar la próxima temporada con el Real Oviedo en Segunda División. La clave para conseguir el ascenso pasa por tener un buen grupo humano y permanecer unidos en el vestuario. La llave la tenemos nosotros mismos, la plantilla, que tenemos que ser capaces de gestionar los buenos y los malos momentos que tengamos durante la temporada. Hay que ser humildes, constantes en el trabajo e ir todos a un mismo objetivo”, manifestó el ex jugador del Mirandés.
Precisamente, en su última participación en Segunda B consiguió el ascenso a Segunda División. Fue el broche perfecto a una campaña regular en la que el conjunto burgalés se mostró como un conjunto muy serio y ordenado en todas sus líneas. En Oviedo quiere repetir aquella hazaña. “En 2012 ascendí con el Mirandés y la verdad es que fue el cierre a una temporada que recordaremos siempre. Vivimos unos días de mucha fiesta, aunque no me quiero imaginar el ascenso en una ciudad como Oviedo. Tiene que ser una locura y algo que seguro mantendré en mi memoria con el paso de los años”, comentó Alain.
En el vestuario carbayón se reencontrará con David Fernández, con el que en 2009 compartió vestuario en el Guadalajara. También el defensa fue uno de los partícipes de su reciente fichaje. “Hablé un par de días con él y me dijo que se encuentra muy cómodo en la ciudad y que el club y todo lo que lo rodea es de superior categoría. Sólo tuvo palabras bonitas para el oviedismo”, reconoció el delantero.
Alain ya sabe lo que es jugar y marcar en el Carlos Tartiere. Su amplia experiencia en la categoría le permitió enfrentarse en varias ocasiones al Real Oviedo, con suerte dispar. “He jugado varias veces en el Carlos Tartiere e incluso tuve la oportunidad de marcar un gol, coincidiendo con mi visita con el Guadalajara, aunque acabamos perdiendo el partido. También jugué allí con el Portugalete, Alavés y Mirandés”, señaló el vizcaíno para a continuación añadir que “es un estadio muy bonito y de categoría superior. Es un campo que llama la atención a los jugadores que los visitamos una vez por temporada, con lo que imagínate poder disfrutarlo cada quince días… El ambiente de futbol que hay en él es impresionante y ojalá que este año pueda vivirlo durante muchos partidos”.
En cuanto al potencial de la plantilla para esta temporada, Alain comentó que “se está confeccionando un grupo muy competitivo, algo que seguro que repercute en beneficio del equipo y de los propios jugadores, que tendremos que trabajar duro en cada entrenamiento y no relajarnos ni un segundo. Habrá que currar mucho cada día”.
El delantero se define como “un futbolista de lucha, sacrificio, trabajo y verticalidad” y espera también "aportar goles porque al final es de lo que vivimos los delanteros, aunque siempre pensando en lo mejor para el equipo”.
Ya para acabar, el nuevo futbolista azul es consciente de que “a la afición del Real Oviedo poco hay que decirle porque seguro que continuará un año más siendo fiel a su equipo. Vamos a trabajar duro para que se sientan orgullosos de nosotros. Ojalá podamos brindarles el ascenso, entrenaremos cada día para ello”.
