Perdió injustamente el Real Oviedo en Ipurúa, en uno de los mejores partidos de la temporada como visitante, y tras estrellar dos balones en el poste y el larguero. Fue en el minuto 93 de partido, últimos segundos del añadido, cuando el Eibar anotaba al rechace de un saque de esquina, dejando sin al menos un punto muy trabajado y merecido para el conjunto oviedista.
Con tres cambios en el once con respecto al equipo titular que se impuso el pasado domingo al Málaga en el Tartiere, el conjunto oviedista salía a Ipurúa con el objetivo de disputarle la posesión a un Eibar que no estuvo cómodo durante toda la primera mitad. Pierre, Jirka y Matheus Aiás como refrescos en la apuesta por una presión alta y robos en campo rival que funcionó. Sin demasiadas ocasiones claras, pero sí con llegadas, los de Ziganda tutearon al conjunto armero, sin conceder en defensa, con un planteamiento muy serio y trabajado que no les dejó hacer a los de Garitano. Tras varias llegadas en los primeros diez minutos del partido, la más clara quizá la tuvo Sangalli, que a centro de Pierre empalaba con la diestra directo a puerta, atrapando Yoel.
Al comienzo de la segunda mitad movió banquillo Ziganda, más rápido de lo habitual. El técnico oviedista le dió entrada en el minuto 54 a Borja Bastón y Pombo, por Jirka y Matheus Aiás, refrescando la banda derecha y la pareja de ataque. Llegaba más el Real Oviedo, aprovechando los cambios de ritmo de Pombo y atacando con muchos efectivos, sobre todo con llegadas por banda. Minutos más tarde Viti y Luismi refrescaron la otra banda y el centro del campo. No cesaba la lluvia intensa sobre Ipurúa, la tuvo Lucas llegando por su banda y golpeando de primeras un centro de Pierre, que atajó el meta armero. Después fue Pombo, quien estrellaba su centro en el poste, sin encontrar rematador. Tapó bien la defensa en un balón franco que se le quedaba al borde del área oviedista al conjunto armero, y Ziganda agotó los cambios con la entrada de Borja Sánchez, con poco más de cinco minutos para el noventa. En el añadido, Pombo estrelló un potente disparo en el larguero, tras desviar Yoel lo justo en una gran estirada. En el 93, y tras un saque de esquina, anotaba el Eibar al rechace tras una primera parada de Femenías.
El Real Oviedo se quedaba sin al menos un punto que hubiera sido justo por el trabajo, la seriedad y valentía con la que encaró la visita a Ipurúa. El equipo entrenará mañana preparando el choque del sábado ante la UD Las Palmas.
