El Real Oviedo llegó a Vallecas con el mismo once y a por los tres puntos y lo demostró. El equipo tuvo unos buenos primeros minutos, con dos llegadas con peligro de Saúl y Tejera, pero aguantó también el estirón del Rayo que puso a prueba a Lunin. Probó Saúl desde el centro del campo aprovechando la posición adelantada de Dimitrieski y se marchó fuera por poco. Llegó entonces una jugada ensayada, en lanzamiento de falta, que ejecutaron Berjón y Rodrigo a la perfección, firmando este último el cero a uno. Respondió el Rayo con un disparo desde la frontal que despejó el meta oviedista, y poco más hasta el descanso.
Retocó filas el Rayo y también el Real Oviedo con un doble cambio en el 60. Salían Coris y Saúl, y reforzaban Jimmy y Lolo el centro del campo con cambio de esquema a defensa de tres con carrilles incluído. No generaba ocasiones claras el Rayo pero en un balón parado y tras aviso del VAR y revisión, el colegiado decretó penalty por mano de Lolo en el área. Empató el Rayo desde los once metros y Rozada resultó expulsado por la protesta. Aún así el equipo no se descompuso. Entró Bárcenas en el último cambio y el conjunto oviedista tuvo alguna opción de peligro que no logró materializar en forma de gol y victoria.
Un punto ante el medio centenar de oviedistas que animaron a los suyos una vez más, y que volverán a estar el sábado en el Carlos Tartiere en un nuevo partido fundamental.
