Ganar para seguir en racha. El Real Oviedo se medía este domingo al Mirandés en Anduva con la intención de cosechar un nuevo triunfo con el que seguir escalando puestos en la clasificación. Los tres puntos ante la SD Eibar el pasado fin de semana supusieron una inyección de moral para los ovetenses que llegaban a esta jornada número 17 de LaLiga Hypermotion en un gran estado de forma. Para este encuentro, el técnico catalán, Luis Carrión alineó un once formado por Leo Román, Lucas, Costas, Calvo, Abel Bretones, Luismi, Colombatto, Viti, Paulino, Seoane y Borja Bastón.
Los azules tuvieron la posesión y el control del balón en los primeros minutos del encuentro aunque no terminaron de llegar con peligro sobre la meta rival. El Mirandés, por su parte, se defendía en su campo y trataba de salir con peligro a la contra aunque la primera acción clara de ataque para los de Lisci terminó en gol. Javi Martón finalizo una buena jugada combinativa y puso, en el 26', el 1-0 en el marcador. Bastón, en el 31', trató de poner la igualada aunque su remate a la media vuelta, tras un centro de Paulino, se marchó desviado de la meta defendida por Ramón Juan Ramírez. Los últimos minutos del primer periodo transcurrieron con igualdad entre los dos conjuntos y el choque se marchó con 1-0 al descanso.
Tras la reanudación, Luis Carrión movió el banquillo y dio entrada a Sebas Moyano, en primer lugar, y a Alemao. El Real Oviedo trató de hacer el tanto del empate cuanto antes aunque el combinado local no le pondría las cosas nada fáciles. Los minutos seguían pasando pero los azules no terminaban de llegar con claridad sobre la meta rival. En el 70', Camarasa y Romario Ibarra entraban en lugar de Luismi y Viti para sumar más efectivos de ataque en busca de la igualada.
El empuje carbayón tuvo su recompensa y Bastón en el minuto 85 puso las tablas. Buen disparo del "9" desde dentro del área para poner el 1-1 en el luminoso y para hacer vibrar a los oviedistas desplazados hasta Anduva. El partido llegaba a los últimos minutos aunque la mala fortuna le jugaría una mala pasada a los azules. Un córner a favor del Mirandés, en el 91', terminó en gol tras un rebote en el cuerpo de Dani Calvo que engañó por completo a Leo Román. Jarro de agua fría en el descuento para los asturianos que lo intentaron hasta el final pero que no pudieron, finalmente, llevarse ningún punto de Miranda de Ebro.
Tras este resultado, el Real Oviedo pone fin a una racha de nueve partidos sin conocer la derrota y ya piensa en el próximo compromiso liguero ante el Espanyol. La nueva cita para los ovetenses tendrá lugar el próximo viernes en el Carlos Tartiere a partir de las 20:30 horas.