El Carlos Tartiere acogió la jornada 9 de LaLiga Smartbank, con un enfrentamiento entre el Real Oviedo y la UD Logroñés, marcado por las decisiones arbitrales, en el que el Real Oviedo perdió por 2-3.
El Cuco Ziganda puso en liza un once formado por Brazão; Juanjo Nieto, Grippo, Bolaño, Mossa; Sangalli, Tejera, Edgar, Nahuel; Obeng y Blanco Leschuk, que desde los primeros minutos le metieron intensidad al partido, presionando la salida de balón del conjunto riojano. En una de esas acciones, cuando tan solo habían transcurrido seis minutos del encuentro, los visitantes anotaban en su propia portería, y el Real Oviedo se adelantaba en el marcador. A la jugada siguiente, Simone Grippo cometía falta sobre un jugador del Logroñés y, tras revisión del VAR, el colegiado cambiaba el color de la cartulina, expulsando al zaguero oviedista. Arribas, en detrimento de Blanco Leschuk, saltó al terreno de juego para reajustar el equipo. Pese a quedarse con un jugador menos, el Real Oviedo se mantuvo muy serio sobre el terreno de juego, aplicándose en defensa, sin permitir que los visitantes generases ocasiones de peligro y llegando a portería rival. Al filo del descanso Arribas anotó para los azules pero el colegiado, tras revisar de nuevo el VAR, anuló el tanto.
Tras el paso por vestuarios el Logroñés, que tenía de su lado el control del juego, anotó por partida doble en dos jugadas aisladas, que no hicieron que el Real Oviedo se achicase y no buscara generar ocasiones sobre el arco defendido por Santamaría. Obeng puso el empate en el marcador, tras rematar en el área pequeña un balón suelto en el área. Sería otra vez el Logroñés el que se pusiera por delante en una jugada de mala suerte para el conjunto de Ziganda. El navarro dio entrada a Viti y Mujica. El partido concluyó con un Real Oviedo buscando el área rival, sin la suerte necesaria para lograr el tanto del empate.
El Real Oviedo volverá al trabajo mañana, desde las 12:30 horas, en El Requexón, para preparar el encuentro del próximo sábado ante la UD Las Palmas.
