Tal día como hoy, un 4 de julio, fecha en la que Estados Unidos de América celebra su fiesta nacional, en el año 1962 el Real Oviedo debutaba en la Liga Internacional de Fútbol.
Aquel día, lleno de festejos y celebraciones por todos los rincones de EE. UU., el Real Oviedo jugó en la ciudad de Nueva York frente a un conjunto sueco, el Elfsborg.
El equipo asturiano era el representante español en aquella edición de la Liga Internacional de Fútbol. En su primer encuentro de la competición, el Real Oviedo, cuyo entrenador era Juan Ochoa, presentó el siguiente once inicial: Boudón, Toni, Marigil, Iguarán, Álvarez, Paquito, Girón, José Luis, Sánchez Lage, Icazuriaga, José María.
En la primera parte, Álvarez resultó lesionado en la clavícula, por lo cual fue sustituido por Larrea. Este se lesionó pocos minutos después en un brazo, por lo que el Real Oviedo tuvo que jugar durante unos 50 minutos con diez jugadores.
Pese a la inferioridad numérica, el Real Oviedo empató el partido (2-2) frente al representante sueco. Los dos goles del Real Oviedo fueron marcados por José Luis y Girón. En días sucesivos, el equipo asturiano se enfrentó a Os Belenenses (Portugal), Wiener Athletiksport (Austria), Panathinaikos (Grecia) y MTK Budapest (Hungría).
Las imágenes que ilustran este texto corresponden a la estancia del Real Oviedo en tierras estadounidenses y han sido proporcionadas por el entonces guardameta del equipo ovetense José Antonio Boudón, miembro de la expedición asturiana que participó en la Liga Internacional de Fútbol.
Boudón compró en Nueva York, al poco de llegar, un tomavistas con el que fueron grabadas imágenes de los jugadores del Real Oviedo en aquel viaje. Las imágenes que acompañan este texto son las primeras en color de un partido de fútbol del Real Oviedo, en esta ocasión con camiseta roja y pantalón blanco, y hasta ahora no habían sido nunca publicadas.
